jueves, 26 de febrero de 2009

It´s the end of the World as we know it, and I feel fine (el mundo no es una pirámide y me siento bien por eso)

Prefiero a los benevolentes Testigos de Jehová, que interrumpen una buena peli, o el partido, un asado, una comida familiar con un fin, que al final de todo...está chingón: la salvación de tu alma.

Después de aventarte un par de diálogos poderosos, acerca de lo mal que está el mundo por no obedecer la palabra del Don, les das una frase contundente e igual de poderosa y se van: también reconocen el libre albedrío de alguien que se quiere pudrir en las llamas onerosas de ese abismo sin Dios que es el infierno

Ellos, podrán pecar un poco de insistentes pero con un sentido último, naive.

Ahora, lo pinche ocurre cuando tus amigos o conocidos se voltean a ofrecerte la oportunidad de hacer de tus sueños realidad: con una previa lana y unos productos fantásticos que se venden solos y que un dia podrás hacer la empresa que tú quieres, la película que siempre deseaste, hacer un montón de lana para hacer lo que quieras, no hay límite...sólo vende tu alma y dedícate a esclavizar a otros 3 neófitos como tú, los cuales te irán subiendo en la escala evolutiva de la organización en cuestión, porque si no lo haces, toda tu vida te arrepentirás porque el que no es exitoso no vale nada.

Traducción: esclavízate y piérdete en esta madre piramidal, al final te darás cuenta que le rendías tributo a alguien y a algo más: pasaste 5-10 años de tu vida pensando que el dinero te dará plenamente la felicidad, y la felicidad consiste en mantener un estilo de vida de otro al que tú sirves, y que pueden pasar años y años...la pirámide crece y se multiplica exponencialmente...pero cumplió su propósito. Ya hiciste millonario a alguien.

Se vuelve millonario el que inventa la pirámide y los que están alrededor de él.

Todo esto me sale porque pasó que una conocida del trabajo , que obvio, nunca te saluda, presiona muy cabrón para que vayas a una cita en la que te va a cambiar la vida: en un negocio que está super increíble y que serías muy tonto si no lo aceptaras...además son productos orgánicos, tú que te cuidas y bla bla bla.

Obvio, nunca hay que decirles, déjame pensarlo. Siempre es un rotundo no, cuando uno imagina hacia donde va. Se encabronan si les dices ¿es una pirámide? Se sacan de onda si les preguntas ¿es un multinivel? te contestan un tímido sí...no sé por qué. E inmediatamente les dices no me interesa. Si vuelven a insistir (porque en su programación, la porquería de la que les llenan la cabeza, deben insitir 2 -3 veces porque tú decretas que él te compre. (No manches, que chida filosofía newagera... tengo todo el poder del universo, si yo decreto algo, y creo que pasará...pasará. Y lo lleno de un pensamiento tan bajo: que él me compre y me haga rica, no bueno:

It´s the end of the world as we know it , and i feel fine.

A todos los que he conocido que andan en estas cosas...al final: los echan, o están tan perdidos a nivel existencial que son víctimas fáciles de alguna secta o religión para que les dé un sentido a su exitosa vida.

Jamás he conocido a los "Diamantes Verdes" esos millonarios que hacen lo que quieren y que cumplen sus sueños realidad. Conozco a millonarios que mueren de infartos por el stress de los millones que invirtieron en la bolsa, y que perdieron en ella. Conozco a uno de los más ricos del mundo, tan estressado por los problemas colaterales de serlo: nadie de ellos es feliz.

Es ahí cuando amablemente , le digo a un Testigo de Jehová desde el interfón: gracias por su atención ( y luego viene mi negativa)...prefiero eso.



It´s the end of the World as we know it, and I feel fine.

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