GENERACION POTTER

NO voy a recomendar la última película de Harry Potter . Tampoco voy a decir que es aburridísima, tampoco que es ñoñísima, cursi, a veces ridícula. Menos voy a aseverar que quisieron hacer un chick-flick con magia y efectitos.
Ni voy a mencionar que es la peor de toda la saga, ya que no mantiene despierto a un tipo con insomnio.

Pero reconozco algo, que la señora Rowling hizo algo que no había sucedido en años: que los chamacos tomaran sus libros (sí, esos artefactos con letras que sirven para aprender algo fuera de la red, y que funcionan sin electricidad, cable, wi-fi, sin baterías para el control remoto) e hicieran algo del período cuaternario: LEER.

Le debemos a esa gente que un día decidió que hacer libros no estaba mal y que podían vivir de ello, llámese la Rowling, la Meyer, la Rice, al King...neta, !gracias! Porque no podemos decir que son libros de alta cultura, pero que tienen una gran dosis de imaginación , misma que contagian a sus lectores. Y bueno, las películas hacen que los fans tengan más elementos identificativos de grupo: en unos quince años, ellos estarán en alguna convención de comics o de fans de Potter como los hay ahora de Star Wars. Y no hemos visto nada de la Gen Potter, aún faltan las dos últimas películas y las series de TV que están negociándose...además de algunas secuelas y video homes.

Y perdón por seguir torturando a algún lector de la generación Potter: ES ÑOÑERRIMO: un adolescente con varita mágica, vestido de batita de mago y peinado de librito...!GOD!